Los seminarios que Jacques Alain Millar dio en Caracas y luego en Bogotá, siguen siendo hoy en día una manera excepcional de adentrarse en la enseñanza de Jacques Lacan,

El efecto de transmisión de estos textos es invalorable para la formación del psicoanalista de orientación lacaniana. En ellos está presente el original estilo de Miller, que nos sorprendió a todos por su inteligencia, su frescura y su novedoso bien-decir sobre los temas más complejos del psicoanálisis y que, además, se mantenía siempre en el debate más actual.

Son también testimonio del esfuerzo de Miller por elucidar a otro Lacan, y por orientar la intensa transferencia que se produjo en torno a su enseñanza, Miller hace ver como Lacan le devolvió a la invención Freudiana su filo cortante para sacar al psicoanálisis de una doctrina estancada. A partir de Lacan, con su distinción entre el falo y el objeto a, los conceptos de inconciente y transferencia no sarán los mismos. Retomar el estatuto de la interpretación y de la clínica a partir de la invención lacaniana del objeto a y del concepto de goce, como lo hace Miller, le devuelve al psicoanálisis su lugar subversivo como praxis.

Los seminarios de Miller también marcan el inicio de un gran recorrido institucional de la Escuela, que partió de la fundación de la Escuela de Campo Freudiano de Caracas, en la cual Miller participó desde su creación, y que culminó en la creación de la Nueva Escuela Lacaniana, cuyos efectos de formación y enseñanza fueron y siguen siendo decisivos para el psicoanálisis de orientación lacaniana en nuestra región.