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Staff


Revista Electrónica de la Facultad de Psicología de la UBA

Año 13 – Número 46

Marzo 2023

 

Secretaria de Extensión, Cultura y Bienestar Universitario

M. Alejandra Rojas

Director General

Jorge A. Biglieri

Generación de Contenido

Pablo Fernández

Diseño

Agustina Espector

Diagramación

Alejandro Zeitlin

Colaboran en este número:

Ignacio Chuchuy

María Agostina Ciampa

Gisela Contino

Florencia Gallelli

Cristian Garay

Florencia Koutsovitis

Guillermo López

Lucía Rossi

Mariana Soler

Maximiliano Zenarola

 

Editorial

Cada 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer. Por esta razón, para este editorial decidimos recorrer algunos hitos y acontecimientos que dieron lugar su establecimiento. Esta fecha empezó a conmemorarse por la ONU en 1975, sin embargo recién 2 años después, se designó de manera oficial, por medio de la Resolución 32/142, en su Asamblea. Los movimientos que le dieron origen tienen alrededor de 100 años, y partieron de las mujeres que -especialmente en Europa- reclamaban el derecho al voto, mejores condiciones de trabajo y la igualdad entre los sexos. En la Argentina este día comenzó a conmemorarse en 1984, luego del restablecimiento de la democracia y el estado de derecho, en 1983.

Fragmentos de una historia

A lo largo de la historia nuestra cultura occidental ha sido testigo de varias expresiones por parte de mujeres que han tenido un papel destacado en un movimiento que es anticipatorio del feminismo. Tal es el caso de Guglielma (o Guillermina) de Bohemia (Bohemia, 1210 - Milán, 24 de agosto de 1281) quien en el siglo XIII creó una iglesia de mujeres. Tras su muerte fue declarada hereje y sus discípulos fueron eliminados por la Inquisición, que destruyó su tumba de Chiaravalle y quemó su cuerpo en el siglo XIV.

Cabe mencionar, unos años más tarde, la figura de Christine de Pizan (1364-1430) quien hacia 1399 comenzó a escribir sobre los derechos de las mujeres y fundó “La Querelle de la Rose”, una agrupación femenina para discutir el acceso de las mujeres al conocimiento. Su libro La ciudad de las damas (1405), constituye una colección de historias de heroínas del pasado, y es considerado por algunos autores como una obra precursora del feminismo contemporáneo.

Podrían mencionarse otras importantes figuras en esta trayectoria histórica, como Margarita Porete (nacida en 1250 y muerta en la hoguera en 1310) o Isotta Nogarola (1418-1466), e incluso Juana Inés de la Cruz (1648/1651-1695). Sin embargo, el significado que en la actualidad asume la lucha por la igualdad de derechos de las mujeres y los reclamos de los movimientos feministas, tienen su origen en la Modernidad, más precisamente con el Iluminismo y la Ilustración. La influencia de dicho movimiento filosófico dio nombre al Siglo XVIII como “Siglo de las Luces”, desembocando en 1789 en la Revolución Francesa cuya “Asamblea Nacional Constituyente” proclamó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.

Como es sabido, el pueblo de París tuvo un enorme papel en los acontecimientos que desembocaron en la caída de Louis XVI. Pero fundamentalmente fueron las mujeres las que, en los mercados de París, desesperadas por la falta de comida y furiosas por rumores de que se estaba acaparando el pan, se rebelaron y decidieron tomar una posición activa, tomando las calles de una manera impactante y violenta. Un enorme grupo compuesto fundamentalmente por mujeres (llamadas despectivamente «las Furias»), marchó el 5 de octubre de 1789 sobre Versalles. Tras varios incidentes, el rey y su familia se vieron obligados a abandonar Versalles. Este hecho, junto con otras acciones a lo largo de este proceso de rebelión, terminó por desactivar el poder monárquico y forzó a la proclamación de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.

Las mujeres, que habían tenido una comprometida y activa postura en el transcurso de la Revolución, descubrieron rápidamente que ser ciudadanas no las hacía iguales a los ojos de la ley, ya que tal declaración de derechos para el hombre no las colocaba a ellas en el mismo lugar. En 1791 una mujer llamada Olympe de Gauges (1748-1793) expuso públicamente el sesgo que sustentaba el documento aprobado por la Asamblea, y publicó su propia Declaración de los Derechos de la Mujer y la Ciudadana. Olympe sostenía allí: “Si la mujer tiene el derecho de subir al patíbulo, ella debe tener igualmente, el derecho de subir a la tribuna.” Olympe exigió que su declaración sea tratada por la Asamblea y que sus puntos sean tenidos en cuenta. En su “Preámbulo” señalaba: “Las madres, hijas, hermanas, representantes de la nación, piden que se las constituya en asamblea nacional. Por considerar que la ignorancia, el olvido o el desprecio de los derechos de la mujer son las únicas causas de los males públicos y de la corrupción de 105 gobiernos, han resuelto exponer en una declaración solemne, los derechos naturales, inalienables y sagrados de la mujer …”. Olympe de Gauges militó también a favor de la abolición de la esclavitud. Luego de la consolidación del gobierno jacobino defendió el federalismo. Fue arrestada en julio de 1793 y ejecutada en noviembre del mismo año por manifestarse abiertamente en contra del centralismo. De este modo la Ilustración da a luz al feminismo, pero también supuso su primera gran derrota.

Durante el Siglo XIX, el camino abierto hacia la consolidación de los Estados-Nación en occidente promovió una gran cantidad de cambios sociales, políticos y económicos en Europa y América. En ese contexto, la forma que adoptó el reclamo por la igualdad de derechos para las mujeres desembocó en el sufragismo, ya que se reivindicaba la igualdad de derechos civiles, incluyendo el voto y la educación. Este movimiento tuvo inicialmente un fuerte impulso en Estados Unidos y el Reino Unido.

El 8 de marzo 1857, en el marco de la Revolución industrial, las trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York salieron a la calle a protestar en masa por las duras condiciones de trabajo. En ese momento la precariedad laboral estaba especialmente acentuada con las trabajadoras, cuyos salarios podían llegar a ser menos de la mitad que los de los hombres solo por el hecho de ser mujeres. Las protestas terminaron con la intervención violenta de la policía contra las manifestantes, pero aquella movilización sentó un primer precedente gracias a su gran repercusión.

Medio siglo después, el 8 de marzo de 1908, una numerosa manifestación de mujeres volvió a tomar las calles de Nueva York para exigir un aumento de sueldo, menos horas de trabajo, derecho al voto y prohibir el trabajo infantil. Al año siguiente, en 1909 una organización de Mujeres Socialistas celebró en EE. UU. el primer Día Internacional de la Mujer. Aunque solo tuvo seguimiento en Nueva York y Chicago, se calcula que unas 15.000 mujeres participaron en una marcha que recorrió la ciudad de Nueva York.

El mes de marzo de 1911 tuvo dos hitos fundamentales. Por un lado, se celebró por primera vez el Día Internacional de la Mujer el 19 de marzo en varios países de Europa y en Estados Unidos. Por otro lado, el 25 de marzo de ese año es testigo de una terrible tragedia que se llevó la vida de 123 trabajadoras textiles y de 23 hombres, donde la víctima más grande tenía 43 años y la más joven 14 años. El incidente ocurrió en la fábrica textil Triangle Shirtwaist Company de Nueva York. Los empleadores habían dispuesto el cierre de las puertas en el edificio durante el horario de trabajo. Esta tragedia generó importantes cambios en la legislación laboral de los Estados Unidos y se volvió una referencia obligada y reiterada en todas las celebraciones del Día Internacional de la Mujer.

Nuestra actualidad

Para conmemorar el 8 de marzo de este año la ONU propuso la consigna “Por un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la igualdad de género”. Esta apuesta de concientización a nivel mundial plantea entre sus principales objetivos: reconocer a las mujeres que están luchando por el avance de la tecnología transformadora y por el acceso a la educación digital, explorar los efectos de la brecha digital de género en el crecimiento de las desigualdades sociales y económicas, promover el respeto de los derechos de las mujeres y las niñas en los espacios digitales y abordar la violencia de género en línea.

Es un día que recuerda la lucha de las mujeres por sus derechos al tiempo que llama a la reflexión sobre diversos temas y problemáticas que las atañen: la igualdad de condiciones para la participación civil, laboral y política; la violencia psicofísica y simbólica, los femicidios, las políticas de género, es decir, todo aquello que de una u otra manera, y en diferentes grados, afecta su cotidianidad y desarrollo.

Claudio Miceli

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